jueves, 3 de abril de 2014

Asociaciones manejadoras de vicuñas se benefician con presupuesto por venta de fibra

Las once Asociaciones Regionales de Comunidades Manejadoras de Vicuña del país, recibieron en la víspera más de 2.6 millones de bolivianos por la venta de 886 kilos de fibra de vicuña, del Programa Nacional de Vicuña dependiente del Ministerio de Medio Ambiente y Agua.

"Los actores propios son las comunidades, porque no buscan intermediarios para vender la fibra, ellos directamente sacan la lana, la fibra en bruto y lo comercializan a nivel nacional y posteriormente a nivel internacional, ellos tienen una venta por kilo, a un precio de 420 dólares", informó la directora de Biodiversidad de este ministerio, Teresa Morales.

En ese marco, destacó el trabajo de los manejadores de vicuña y el aprovechamiento de ese recurso sin dañar la biodiversidad.

Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Manejadores de Vicuña, Alfonso Casilla, destacó la labor del gobierno al apoyarlos en el aprovechamiento de la fibra de esa especie y en la labor de preservar la biodiversidad y evitar que ese extingan animales que sólo existen en Bolivia.

"En nuestro país hay 16 asociaciones regionales y son más de 77 comunidades manejadoras de vicuña, donde se está cuidando a la especie y por otro lado las autoridades competentes que también se integran en esta labor para la preservación y el manejo sostenible", sostuvo.

Asimismo, el representante de los manejadores de vicuña señaló que gracias a la unidad de las asociaciones es que se pudo lograr la venta de esa materia prima a un "buen" precio, porque se la exportó a una empresa instalada en Argentina. Agregó que el 82 por ciento de la venta de la fibra está destinado a las comunidades que trabajan en la esquila.

La vicuña es una especie silvestre que vive en zonas altas de la Cordillera de los Andes y es apreciada por poseer una de las fibras más finas del mundo. Esta especie habita en Bolivia y se encuentra distribuida en los departamentos de La Paz, Oruro, Potosí, Cochabamba y Tarija.

Durante la época prehispánica la fibra de vicuña era usada solamente para las prendas de vestir de las autoridades incaicas, pero con la llegada de los españoles se abrió un mercado en toda Europa, provocándose de esa manera la caza furtiva de esa especie y llegando a poner en peligro de extinción.

Actualmente en Bolivia, la caza y el cautiverio de estos animales están prohibidos, sin embargo, desde 1998 el Estado permite la captura y esquila de la vicuña, desde entonces el "Programa Vicuña" logró vender esta materia prima en seis oportunidades. Con la protección de esta especie, desde 1997 la población se incrementó de 33.596 a 112.249 vicuñas en el país.

No hay comentarios:

Publicar un comentario